En el otro artículo ya os he introducido un poquito en la Essaouira que todo el mundo conoce: historia, playa, surf, medina. Ahora os presento la Esencia de Essaouira, artesanía, pintura, telares, que le dan a esta ciudad el aire bohemio que enamora.
Jimi Hendrix estuvo alojado en el hotel llamado Du Pacha convertido ahora en el Riad Le Medina en los años 70, atrapado por el aire hippie que se respiraba en esta ciudad.
Ese aire bohemio viene marcado también por los pintores que decidieron hacer de Essaouira su residencia, adornando de colores y belleza las angostas callejuelas de su Medina. Con el paso del tiempo se fueron abriendo Galerías de Arte como acogida a tanta creatividad y talento . Puedes verlos aquí.

Una de las innumerables calles dedicadas a la pintura

Mirada que hipnotiza por su belleza y realismo
Índice
LA CIUDAD DE LA TOLERANCIA Y LA CONVIVENCIA
Essaouira sorprende siempre. Hasta las inmensas murallas que rodean su magnífica medina del siglo XVIII rezuman energía e historia por cada una de sus piedras…, tropezar con personas de todas las etnias, de variopintos y diferentes peinados, es natural y cotidiano. Dando una idea de la tolerancia que se respira en esta ciudad; además de la coexistencia y convivencia de tres religiones muy diferentes entre sí …
Dentro de la Medina te encuentras con sinagogas rodeadas de mezquitas, con tiendas de antigüedades luciendo en sus vitrinas “menorahs” (candelabros judíos de 7 brazos) y teniendo por vecinos una tienda de venta de caftanes.

Una de las tantas sinagogas que te encontrarás por el barrio Judío.

Presidiendo la puerta La estrella de David, símbolo identitario del judaísmo.
La Iglesia Católica está a las afueras de la Medina. Esta coexistencia entre religiones se remonta siglos atrás, dando un claro ejemplo de indulgencia y respeto para todos.
ARTESANÍA AUTÓCTONA
En Essaouira la creatividad no tiene límites, hasta de lo más insospechado hacen auténticas obras de arte.

Elefante hecho con cadenas de bicicletas
Este es el espíritu creativo y bohemio que te atrapa callejeando la Medina y te pierdes por sus pequeños pasillos. Podrás encontrar talleres artesanales trabajando en sus creaciones y reciclando cualquier material imaginable.

Estás cansado de usar cucharas viejas? Ven a Essaouira y contribuye al arte y la creación.
DISFRUTANDO DE LA ARTESANÍA EN TODAS SUS FACETAS
En una de las calles que hasta ahora no había transitado, me encuentro con una pequeña tienda y un joven trabajando la madera. Curiosa me paro para preguntarle que era lo que vendía. Younes es autóctono de Essaouira, de profesión, diseñador de interiores, lo mismo te vende artículos de decoración que te reforma todo el interior de tu casa.
Decidió abrir esta pequeña tiendecita para mostrar parte de su trabajo a todos los turistas que pasean a diario por las calles de la Medina. Al lado tiene un Riad lo que le facilita el hecho de que los propios huéspedes vean su tienda nada más salir del mismo. Un chico de 28 años inquieto, emprendedor, que ha decidido aportar su granito de arena para que la bohemia energía que arropa su ciudad, no se pierda y siga siendo parte del encanto y magia que la hace tan especial.
Es fascinante ver cómo la artesanía sigue siendo uno de los motores que mueve la economía de Essaouira. Desde madera, pasando por la pintura, tiendas vintage, artesanos trabajando la rafia, confeccionando zapatos a medida bajo pedido; telares donde los colores te envuelven al igual que las mantas que con tanto tiempo y cariño tejen.

Todo hecho a mano, tan sólo con Rafia

Somos de colores!
BIENVENIDA!!
Absorta en mis pensamientos, continúo vagando el empedrado de las calles, una sonrisa y una bienvenida! Me reclaman. Es un pequeño bazar colmado de diferentes y coloridos artículos.
Estanterías repletas de joyas hechas a mano de plata Bereber (pueblos étnicos que habitan en el norte de África). Artículos de decoración manufacturados provenientes del norte de Marruecos, chilabas provenientes de costureros de su propio pueblo natal.
Ahmed, el amable chico que me atendió, me explica un poquito su historia . Él y su socio al igual que muchos de los chicos que trabajan a su alrededor vienen de ERRACHIDIA, concretamente de un pueblito llamado MESKI. Decidido a probar fortuna fuera de su pueblo, recabó en Essaouira, donde lleva más de 10 años viviendo y trabajando.
Habla de lo mucho que ha ido cambiando y evolucionando Essaouira, que cada vez alberga a más turistas. Su fuente principal de ingresos. Él en concreto comenzó trabajando para otros hasta que con su socio y amigo Hassan abrieron hace ahora 1 año esta tiendita llena de encanto y colorido, situada en una de las calles más conocidas de la Medina, la calle de LA POSTE y al lado del Museo Sidi Mohammed Ben Abdellah .

Túnicas hechas a mano!. Todo en la misma tienda.
El té, símbolo de hospitalidad y generosidad por parte de Ahmed.

Una muestra multicolor de la hermosa joyería que te encontrarás en esta tienda.
UN LUGAR PARA COMER FUERA DE LO COMÚN
Cuando visitas una ciudad, estás acostumbrado a encontrarte todo tipo de restaurantes, con diferentes cartas y adaptados a todos los bolsillos. Essaouira te ofrece algo más.
Escapando de todo convencionalismo, y haciendo honor a la energía hippie que destilan sus calles, te encuentras con un local de no más de 3 metros cuadrados, 3 mesas dentro y 2 fuera… con un simpático señor que te ofrece pescado del día.
Su persona es tan interesante como su comida, te ameniza la velada mientras cocina tu cena, contándote anécdotas de la Essaouira de los años 70, cuando comenzaron a llegar los turistas de manera masiva. Turistas en su mayoría hippies, que buscaban cambio de vida, tranquilidad y libertad.
La llegada de los amantes de los deportes acuáticos, animados por los vientos alisios que mecen la ciudad, hizo que su esencia hippie fuera “in crescendo”, rastas, música callejera, buen rollo y alegría. Algo que les gusta mucho destacar a sus habitantes y de lo que más orgullosos se sienten es de la Tolerancia, Seguridad y Tranquilidad que ofrece la ciudad tanto a los autóctonos como a los turistas. No hay policía por ningún lado.

La pequeña terraza de Ahmed

3 simples mesas que serán el soporte del más delicioso y espectacular pescado que habrás comido jamás!.
Atrapada por su simpatía, decides pedirle la carta, a lo que él con su sonrisa perenne, sus ojos llenos de historia y sonando de fondo Bob Dylan, te dice que la carta eres TÚ. Lo que tú le pidas él te lo sirve. Así quedas para cenar no sin antes haberle dicho el capricho de pescado que deseas para cenar… Mi antojo ese día: Langostinos.
EL CAFÉ RES-AMIRA
Así me recibió en su “casa” Ahmed: Rue Mehdi Ibn Toumert, la primera boca calle a mano izda subiendo la calle de LA POSTE.

El mejor recibimiento!
Sonriendo y mostrando lo que con tanto cariño, sentido del humor y música nos iba a preparar.

Recién sacado del puerto!!